Censurando al coronavirus
Ya no se habla de otro tema en nuestras redes sociales, el COVID-19 se ha convertido en trending topic a nivel mundial.
Los usuarios de las socialnetworks recibimos a diario una gran cantidad de información sobre el coronavirus y la forma de tratarlo. Pero no solo hay información dentro de los datos que nos llegan, también encontramos fakes news circulando por la red.
Las noticias falsas se crean a través de un contenido pseudoperiodístico con la finalidad de influir en las conductas de la población. En este caso, alarmándonos, como pudimos observar con la compra masiva de alimentos en supermercados o el aumento de la demanda de papel higiénico en la nueva crisis del coronavirus.
Los bulos están a la orden del día. Desde que explotó la fiebre del COVID-19 en las redes sociales, muchos usuarios no solo reclamamos medidas eficaces para esta pandemia global, sino que también reclamamos medidas para otro tipo de pandemia mundial: la desinformación.
Las redes sociales en contra la desinformación.
Youtube fue la primera red social en tomar medidas contra el coronavirus, y monitorizó algunas informaciones sobre el tema. A su vez, comenzó a etiquetar la información sobre el coronavirus como contenido sensible.
En el mes de noviembre, la plataforma de vídeos anunció una nueva normativa dentro de sus políticas para combatir la desinformación que algunos canales difundían sobre el COVID-19.
Esta nueva norma entró en vigor el 10 de diciembre: automáticamente no se monetizarán los vídeos con contenido sobre el coronavirus por evento delicado.
Pero como en la mayoría de reglas, siempre hay una excepción. Solo podrán monetizar los vídeos sobre el COVID-19 aquellos canales que sean profesionales y estén verificados, con lo consiguiente, asegurando una difusión de información veraz.
Se trata de una medida eficaz creada con la finalidad de disminuir las fakes news, puesto que son muchos los creadores de contenido para Youtube que mediante el objetivo de ganar audiencia y dinero, se inventan noticias y las promueven por la red.
Otra red social que se suma al movimiento para frenar los bulos del coronavirus es Twitter. La red de microblogging ya nos prohíbe publicar cualquier contenido contradictorio a la información que anuncian los expertos o aquella que fomenta remedios y tratamientos falsos contra el COVID-19.
Twitter asegura que ya ha eliminado más de 2.200 tweets con contenido dañino, únicamente en España.
Instagram también ha anunciado que dejará de recomendar todo tipo de contenido que trate el COVID-19, exceptuando las publicaciones de la OMS.
A su vez su matriz, Facebook, ha asegurado que los anuncios sobre el coronavirus de la OMS serán gratuitos en la aplicación con tal de mantenernos informados de una forma veraz.
Gracias a estar nuevas políticas adoptadas por las redes sociales contra todo tipo de información falsa, sobre todo aquella relacionada con esta nueva enfermedad y la gestión de las autoridades ante esta crisis mundial, los usuarios somos capaces de obtener una información veraz y protegernos de forma adecuada en esta situación.
Pero aún teniendo estas normativas, nos queda un arduo y largo camino en la lucha contra la desinformación en nuestras redes sociales.